¿Por qué duelen los músculos después de un entrenamiento intenso?

No importa qué tan deportista se sea, si se es experimentado o si se es un principiante, pues el dolor muscular después de una rutina intensa a la que no se está acostumbrado es algo que la mayoría de los humanos padecen. Este fenómeno tan común se conoce como "dolor muscular de aparición tardía" (DOMS, por sus siglas en inglés) y ocurre porque el cuerpo se está adaptando a nuevos niveles de esfuerzo físico. Pero es poco conocida la razón y el papel que el ácido láctico tiene en estos procesos fisiológicos. Para quienes buscan mejorar su recuperación y rendimiento, existen suplementos útiles, como los disponibles en Deuspower, pues los nutrientes y componentes óptimos son esenciales para una correcta y más rápida reposición de músculos y tejidos.


La respuesta del cuerpo al ejercicio

Cuando se realiza un ejercicio intenso al que los músculos no están acostumbrados se producen pequeños desgarros en las fibras musculares. Estos desgarros microscópicos en las fibras musculares constituyen un proceso de fortalecimiento, ya que durante la recuperación el cuerpo repara estos daños y refuerza el músculo, haciéndolo más fuerte y resistente.


El ácido láctico: un mito común

La mayor creencia popular de este dolor físico es debido a la acumulación de ácido láctico en los músculos, y aunque el ácido láctico juega un papel importante en el metabolismo muscular, no es el responsable del famoso dolor post-entrenamiento. El ácido láctico es formado cuando el cuerpo requiere producir energía rápidamente por un esfuerzo superior, ya que el suministro de oxígeno no puede satisfacer la demanda. La glucólisis anaeróbica es la responsable de este proceso, ya que el ácido láctico es un subproducto de la misma, y es una importante e indispensable fuente de energía. Pasadas las horas el cuerpo logra degradar este compuesto, por lo que el dolor que aparece al día siguiente no es debido al ácido láctico.


¿Qué causa realmente el dolor muscular?

El dolor muscular post-entrenamiento es causado principalmente por los microdesgarros en las fibras musculares y la respuesta inflamatoria del cuerpo ante estas lesiones. Cuando los músculos se dañan durante el ejercicio, el cuerpo inicia un proceso de reparación que involucra la inflamación, y es esta respuesta inflamatoria la que es responsable del molesto dolor. La recuperación hace que el cuerpo aumente el flujo sanguíneo a los músculos afectados, junto con nutrientes como proteínas y oxígeno. Como consecuencia los nervios de los músculos son estimulados, provocando dolor 24 a 72 horas después del entrenamiento. Pero esto es un buena señal, pues el cuerpo está trabajando para reparar y fortalecerse.


¿Cómo aliviar el dolor muscular?

Aunque necesario, el DOMS es incómodo, por lo que estiramientos suaves y caminatas que reduzcan la tensión o rigidez muscular son una gran opción para disminuir el dolor, además de hidratarse correctamente, aplicar calor, masajes y una buena alimentación, también son medidas eficaces para contrarrestar el dolor post- entrenamiento. Mucha veces aunque no es agradable el dolor es parte del crecimiento y mejoramiento físico, por lo que entenderlo puede ayudar a aminorarlo mientras se optimiza la recuperación, pero si es muy intenso se debe consultar a un médico.